Detén el frenesí de lo egoico primeramente sosegando tu mente para que de inmediato el corazón se abra, como una flor en primavera, y exhale su sutil fragancia eterna. No intentes conseguir deseos personales; sencillamente haz lo que por Amor debes, lo que bendice lo esencial y no se entretiene con lo banal o superficial. No busques buscar; busca encontrar. No te preocupes por lo que no tienes en este momento, pues todo aquello que en esencia precisas lo tienes siempre ahora, siempre aquí... en este día hermoso, en esta noche brillante, o en esta tormenta relampagueante, en el calor del verano o en el gélido invierno..., mira más allá de lo pasajero, hacia lo sustancial y definitivo. Abre lo ojos del alma a la luz del Ser. No hay mayor confusión que creer que se puede lograr lo inefable justificando su contrario. El espíritu y la carne son antagónicos, o estás libre en uno o sueñas tu doloroso aprisionamiento en la otra. Decide lo sensato y no sigas con la insensatez de querer acaparar lo limitado y transitorio al identificarte con lo que muere. Profundiza en la consciencia. Medita. Ahonda. Encuentra la certeza que siempre está allende las dudas que te distraen, No titubees por más tiempo o cada segundo de indecisión sólo te ofrecerá angustia soterrada bajo capas de auto-engaño. No puedes estar pendulando entrambos sin sufrir. La carne finalmente te lo quita todo mientras que el espíritu es tu ser, tu eternidad gozosa y tu ilimitud, y en él la totalidad es indivisa. Responsabilízate del resultado de tus decisiones y resuelve, ahora, en favor de lo eterno, de lo santo... el bienaventurado recuerdo de la plenitud te está esperando en lo más hondo de ti.
No te vayas en busca de mundanos logros. Permanece en lo puro... profundiza con consciencia en lo inmediato. Quédate presente, totalmente presente en ti mismo, y contempla como la luz asciende desde tus profundidades hasta el infinito, tocando tu corazón con su dulce y bendita paz... estate consciente, agradecido y presente, bien presente... totalmente agradecido... hasta que sólo quede la claridad del Amor... hasta que sólo haya paz, incontestable y esplendente paz... hasta que sólo haya la plenitud del Ser.
KHAAM-EL
Lo inmediato te trae lo definitivo si no te dispersas con lo transitorio.
Medita... profundiza... sé consciente de ser consciencia.
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