martes, 6 de diciembre de 2016

CREACIÓN *



   La forma se santifica en la transparencia de una mirada limpia, libre de todo juicio pasado, sin fantasías futuras. centrada en un presente que se eterniza en un flujo de bienaventuranza de espíritu que transforma el tiempo en una herramienta de trascendencia... regresando, después de todo después, a antes de todo antes.

   Toda la Creación de la Divina Unicidad es una gloriosa sinfonía, un agradecido canto de alabanza. es ritmo y danza... bendita melodía, sagrada vibración... luz... la eterna luz del Amor.

   La Verdad se expresa en las palabras y más allá de ellas.
   La Verdad se expresa en los silencios y más allá de ellos.
   La Verdad se expresa en las acciones y más allá de ellas.
   La Verdad se expresa en los descansos y más allá de ellos.

   La Verdad fluye como un manantial de vida eterna en ti, en mí, en todos y en todo... pues la Verdad en constante acción es nuestra naturaleza real, íntima y sagrada. Escucha, escucha la Palabra, la Palabra Creadora... escúchala con el santo oído interno.

   Todo, absolutamente todo, vibra en Dios.

   Atiende con devoción y permite que tu sitio te sea revelado por la excelsa cadencia de la santísima melodía que a todo le canta con igual candor. No temas, todo te irá bien si sigues el canto de la Verdad y el Amor.

   Nuestra función aquí es sentir el latido del Verbo Creador hecho sustantivo; o, lo que es lo mismo, sentir plenamente el Espíritu hecho sustancia de expresión fraterna. Desechando cualquier discordia y eligiendo la comunión de la relación santa para que todo revele su liberador significado último; buscando siempre lo esencial y eterno, lo pacífico e inclusivo, difuminando esa proyección egotista, distorsionada y volátil, resultado de un pensamiento segmentador.

   Siente el latido del Verbo Creador palpitar, con fuerza irrefrenable en tu corazón valiente y lleno de Amor, y lo sentirás palpitar en todos y en todo. En cualquier adjetivo, pronombre, adverbio, etc, vislumbrarás el núcleo mismo del Verbo Creador que los sustenta (traspasando todo humano vocabulario); pues, más allá de las diferencias, sentirás el rítmico curso eterno de la esencia vertiéndose milagrosamente sobre todos tus referentes, conceptos e ideas, transformándolos y purificándolos hasta que sólo quede lo permanente e indiviso, lo santo y bendito.

   La vida tan sólo parece complicada en su superficie, en la diversidad de sus relativas percepciones; más, en su sustancialidad más honda, la vida es simple por su indivisa sencillez... vive en paz, no sigas al miedo en sus dementes consejos iracundos, y lo obvio se hace patente en el instante presente si sabes contemplarlo sin prejuicios... la vida es del espíritu, no de la carne. No apego es libertad... siente el poder de la vida eterna que actúa en armoniosa y bella danza, sin aspectos disruptivos ni interrupciones... Aquí, ahora, así, la consciencia torna a reconocerse eterna, bienaventurada e íntegra... en amorosísima plenitud.

   La Compleción del Verbo Creador en Su Inseparable Creación es Plenitud... y tú, y yo, y todos, en esencia y en verdad, somos sempiternas notas en esa santísima Voz que pronuncia ese sublime canto de inefabilidad y vida eterna. No seas, por más tiempo, ni tibio ni pusilánime y únete de nuevo al jubiloso canto de ininterrumpida bendición.   Namasté.

KHAAM-EL




   Fluye en la Creación con Amor y revive a lo eterno como antes de todo antes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario